Introducción

He decidido hacer una introducción a mi sección ya que mi vida es un poco fuera de lo habitual y, difícilmente se podría entender con una simple narración cronológica de lo que ha sido de mí en estos últimos años… Mi manera de ver las cosas está muy relacionada a un plan divino que se está llevando a cabo en el planeta. Yo pienso que en la vida lo que importa no es tanto lo que pasa, sino cómo reaccionamos ante lo que pasa. Entendido lo anterior, voy a expresar lo que siento de todo esto que está pasando…

En la vida pienso que hay leyes que son, hasta cierto punto, inmutables -por eso son leyes-, una de esas es la ley de causa y efecto, es decir, que si yo siembro una semilla de manzana lo que voy a cosechar son manzanas y, si yo siembro una semilla de peras lo que voy a cosechar son peras. Como familia, hace ya algún tiempo que descubrimos esta sabia ley de la vida y comenzamos, si no a hacer el bien, al menos procurar no hacer el mal a nadie. Es lo que para ciertas filosofías orientales es el karma, entonces, cuando uno ya se dio cuenta de esta ley universal, uno no quiere cosechar cosas que no desea, por lo tanto, uno pone ya atención en lo que está sembrando, entonces, ¡oh! maravilloso milagro, el miedo desaparece.

Y desaparece porque uno ya está en paz, en paz con uno mismo, entonces, todo lo que nos pasa son bendiciones. Tal vez uno por descuido pueda seguir cometiendo pequeños “errores”, entonces. uno cosecha el fruto de esos pequeños errores, pero con una conciencia despierta los integra para un crecimiento interno. De hecho, el error no denigra al ser humano, lo que lo denigra es la perseverancia en el mismo error. El error es tan antiguo como el mismo hombre, es nuestro más antiguo modo de aprendizaje, la misma ciencia lo ha adoptado en su método científico: ensayo-error, ensayo-error, y así aprende y avanza. La diferencia entre la ciencia y el ser humano común es que la ciencia tiene un sistema, documenta ese error y aprende de él, el hombre común no, por eso la ciencia ya llegó a la luna pero el hombre sigue sufriendo en este mismo planeta.

Dicho lo anterior, y viendo la profunda paz, amor y su característica luminosa sonrisa en mi papá, conectado a catéteres, tubos para respirar, para alimentarlo, para hacer del baño, etc., es que abordaré este tema y esta situación, !nuestra situación!, desde un punto de vista inclinado más a nuestra espiritualidad.